El bizcochuelo italiano de 12 cucharadas es una receta sencilla y rápida que combina pocos ingredientes para obtener un resultado delicioso y esponjoso. Este clásico de la repostería italiana es perfecto para acompañar un café, un té o como postre después de una comida. La combinación de limón y azúcar le da un toque cítrico y fresco, mientras que la textura es ligera y aireada gracias al uso de aceite y polvo de hornear. Lo mejor de esta receta es que las medidas se basan en cucharadas, lo que facilita mucho la preparación sin necesidad de balanza.
Recetas fáciles
Este bizcochuelo es ideal para aquellos que buscan una receta fácil y rápida, pero con un resultado de calidad profesional. Además, al ser una receta tan básica, podés personalizarla fácilmente agregando ingredientes como frutas frescas, chips de chocolate o frutos secos para darle un toque único y adaptarla a tus preferencias.
Ingredientes
Para el bizcochuelo:
- 3 huevos
- 12 cucharadas de azúcar
- 12 cucharadas de aceite neutro (como aceite de girasol)
- 12 cucharadas de leche
- 12 cucharadas de harina 0000
- Ralladura y jugo de medio limón
- 11 g de polvo de hornear
- Manteca o aceite para engrasar el molde
Opcional para decorar:
- Azúcar impalpable para espolvorear
- Glaseado de limón (mezcla de jugo de limón y azúcar impalpable)
- Frutas frescas (frutillas, frambuesas o arándanos)
Preparación
- Preparar los ingredientes:
Precalentar el horno a 180°C. Engrasar un molde para torta de aproximadamente 20 cm de diámetro con manteca o aceite y espolvorear ligeramente con harina para evitar que el bizcochuelo se pegue. - Preparar la mezcla base:
En un bol grande, batir los huevos junto con el azúcar hasta obtener una mezcla espumosa y clara. Este paso es clave para incorporar aire a la mezcla y lograr una textura más ligera. - Incorporar los líquidos:
Añadir el aceite y mezclar bien hasta que se integre por completo. Luego, agregar la leche y seguir mezclando hasta que la mezcla quede homogénea. - Añadir los ingredientes secos:
Tamizar la harina junto con el polvo de hornear para evitar grumos y añadirlos de a poco a la mezcla, removiendo suavemente con una espátula o una cuchara de madera para no perder el aire incorporado. - Incorporar el limón:
Añadir la ralladura y el jugo de medio limón. Este paso le dará al bizcochuelo un toque cítrico y fresco, perfecto para equilibrar el dulzor. Mezclar hasta que todos los ingredientes estén bien integrados. - Hornear:
Verter la mezcla en el molde preparado y llevar al horno precalentado a 180°C. Hornear durante aproximadamente 25 a 30 minutos o hasta que la superficie esté dorada y al insertar un palillo en el centro, este salga limpio. - Enfriar y decorar:
Retirar el bizcochuelo del horno y dejar enfriar en el molde durante 10 minutos. Luego, desmoldar y dejar enfriar completamente sobre una rejilla.
Si lo deseás, podés espolvorear azúcar impalpable sobre la superficie o preparar un glaseado de limón mezclando azúcar impalpable con unas gotas de jugo de limón hasta obtener una consistencia espesa. También podés decorarlo con frutas frescas para darle un toque de color y frescura - Servir:
Cortar en porciones y disfrutar. Este bizcochuelo queda perfecto tanto solo como acompañado de crema o frutas frescas.
Consejos para lograr un bizcochuelo perfecto
- Usá huevos a temperatura ambiente: Esto facilita que se integren mejor con el azúcar y el resto de los ingredientes, aportando una textura más aireada.
- No sobrebatir la mezcla: Cuando agregues la harina, mezclá suavemente para que el bizcochuelo quede esponjoso y no pierda volumen.
- Controlá la cocción: Cada horno es diferente, así que comenzá a revisar el bizcochuelo después de 25 minutos. Si el palillo sale limpio, está listo.
- Aceite neutro: El aceite de girasol o de maíz funciona mejor porque no altera el sabor del bizcochuelo.
- Mejor sabor: Si querés un sabor más intenso, podés añadir una cucharadita de esencia de vainilla o sustituir el limón por naranja para variar el toque cítrico.
Variaciones
- Versión de naranja: Sustituí el limón por ralladura y jugo de naranja para un sabor más suave y dulce.
- Bizcochuelo marmolado: Añadí una cucharada de cacao en polvo a la mitad de la mezcla y mezclá suavemente para crear un efecto marmolado.
- Versión sin lactosa: Podés sustituir la leche por leche vegetal (como leche de almendras o de avena) y el aceite por margarina o aceite de coco.
- Bizcochuelo más esponjoso: Si querés una textura más aireada, podés separar las claras de las yemas. Batí las claras a punto nieve y luego incorporalas con movimientos envolventes al final de la mezcla.
Sugerencias para servir
Este bizcochuelo es muy versátil y podés servirlo de varias maneras:
- Con una bola de helado de vainilla y frutos rojos.
- Cubierto con un glaseado de limón o naranja.
- Acompañado de crema batida y una pizca de ralladura de limón para un toque fresco.
- Podés cortarlo en capas y rellenarlo con mermelada o crema pastelera para convertirlo en un postre más sofisticado.
Preguntas Frecuentes
1. ¿Puedo usar harina leudante en lugar de harina común y polvo de hornear?
Sí, podés usar harina leudante, pero en ese caso omití el polvo de hornear.
2. ¿Cuánto tiempo se conserva el bizcochuelo?
Si lo guardás en un recipiente hermético, se mantiene fresco hasta por 3 días a temperatura ambiente. Si hace mucho calor, es mejor conservarlo en la heladera.
3. ¿Puedo congelarlo?
Sí, este bizcochuelo se congela muy bien. Envolvelo en film transparente y colocálo en una bolsa para congelador. Dura hasta 2 meses en el freezer.
Conclusión
Este bizcochuelo italiano de 12 cucharadas es una receta fácil y rápida, ideal para cualquier momento del día. Su combinación de ingredientes simples y el toque cítrico del limón lo hacen perfecto para acompañar una taza de café o té. Además, podés adaptarlo fácilmente a tus gustos personales con diferentes sabores y coberturas. Con esta receta, vas a poder disfrutar de un bizcochuelo casero con una textura suave y un sabor delicioso, siguiendo solo unos pocos pasos.